Tengo una capacidad de comprometerme con la gente que me rodea nula. Por ello sé que nunca podré tener compañeros reales de batalla o formar una simple familia, por ejemplo. Es por mí.
Los esteticistas tenían razón, no hay nada que pueda cambiar a los seres humanos, nuestro sentimiento es la impotencia y nuestro estado final la resignación.
Además, se me pasó la infancia volando, la mejor época de nuestras vidas e irónicamente la más corta. En ella soñamos cada día. Conforme crecemos vamos perdiendo esa capacidad y cambiamos la manera de ver nuestra realidad, entonces fantaseamos una vez por semana, una vez por mes o incluso dejamos de hacerlo durante demasiado tiempo, hasta que un buen día nos olvidamos.
Soñar es sencillo y bonito, además de necesario. Y digo yo si los avanzados genetistas de hoy no podrían idear el "antihumano", aquel que muriese feliz siendo niño, para la eternidad.
Los esteticistas tenían razón, no hay nada que pueda cambiar a los seres humanos, nuestro sentimiento es la impotencia y nuestro estado final la resignación.
Además, se me pasó la infancia volando, la mejor época de nuestras vidas e irónicamente la más corta. En ella soñamos cada día. Conforme crecemos vamos perdiendo esa capacidad y cambiamos la manera de ver nuestra realidad, entonces fantaseamos una vez por semana, una vez por mes o incluso dejamos de hacerlo durante demasiado tiempo, hasta que un buen día nos olvidamos.
Soñar es sencillo y bonito, además de necesario. Y digo yo si los avanzados genetistas de hoy no podrían idear el "antihumano", aquel que muriese feliz siendo niño, para la eternidad.
Confesiones 1
The Daily Dream: Pignoise - Solo quiero amor
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario